Historias

Barrranquillera relató la angustia que vivió su hija durante tiroteo en colegio de Estados Unidos

Su hija Nicolle Martin, de 14 años y nacida en Estados Unidos, le escribió un mensaje a su teléfono: “Mami hay un tirador en mi escuela. Estamos escondidos”.

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“Estaba recogiendo a mi hijo en su escuela y vi pasar a la Policía con las sirenas encendidas. Tuve un mal presentimiento y le dije a mi hijo menor: algo pasó en el colegio de tus hermanos”. Así fueron los primeros momentos de angustia para Grace Martin, una barranquillera madre de una alumna de la Marjory Stoneman Douglas High School de Parkland (Florida, EEUU), donde tras un tiroteo perdieron la vida 17 estudiantes.

[VER: Tiroteo en colegio de Estados Unidos deja al menos 17 muertos ]

Escuche aquí el relato completo:

Minutos después, su hija Nicolle Martin, de 14 años y nacida en Estados Unidos, le escribió un mensaje a su teléfono: “Mami hay un tirador en mi escuela. Estamos escondidos”.

Grace, asustada, llamó a su esposo Ryan Martin, un médico también barranquillero y se fue rumbo a su casa con su hijo de 9 años, a quien acababa de recoger en un colegio cercano al lugar de los hechos.

“Llegué a mi casa y lo primero que hice fue prender el televisor para ver qué estaba pasando y, efectivamente, fue para mí la peor noticia. Mi hija estaba escondida junto con 100 estudiantes más en un habitación del colegio”, narró Grace a EL HERALDO. Su hija aún no quiere hablar de los hechos, pues todavía se encuentra en estado de shock tras atestiguar los actos violentos.

Momentos previos al tiroteo, Nicolle estudiante de noveno grado, estaba en una clase de producción de televisión. “Eran las 2:24 de la tarde; ellos escucharon la alarma de incendios y una voz que a través del megáfono les decia que debían abandonar el edificio y salieron corriendo del salón. Pensaron que algo real estaba sucediendo, porque en horas de la mañana habían tenido un simulacro de incendios.

Cuando bajaba las escaleras, escuchó los disparos y dio la media vuelta y se regresó nuevamente al salón donde estaba para resguardarse junto a su profesor y los estudiantes. “Ellos estaban en un segundo piso de otro edificio de la escuela, mientras Nikolaus Cruz, disparaba en otro inmueble de la institución, narró Martin.

Aunque podían oír los disparos y las sirenas de la Policía, no sabían exactamente que estaba ocurriendo.

“Luego escucharon un sonido muy cerca de su salón, probablemente fue alguien que tocó la puerta muy fuerte. Ellos se asustaron y por la impresión movieron unas luces de producción que cayeron y causaron un ruido que los angustió mucho. Pensaron que los descubrirían. En ese momento se miraron las caras y se dijeron lo mucho que se querían”.

Mientras Nicolle se comunicaba por mensajes con Grace, ella afirma que lidiaba con la impotencia de no poder hacer nada. Era doble la angustia, por Nicolle y por su otro hijo Anthony de 12 años quien estaba en la contigua Marjory Stoneman Douglas Middle School, también encerrado en su salón sin saber que pasaba.

“Yo me arrodillé en mi casa para orar por mis dos hijos quienes estaban atrapados. Ellos no sabían lo que estaba pasando y necesitaban de mi mucha calma. Mi esposo estaba en los alrededores de la escuela pero todo estaba acordonado. Dos horas después pudieron salir, expresó Grace.

Un día después de la tragedia, afirma que la angustia sigue latente. “Hoy amanecimos con mucha tristeza en nuestro corazón porque nos enteramos que compañeros de mi hija han muerto”, añadió Grace quien desde hace 18 años reside en Estados Unidos.

Sostiene que Nicolle quien estudia desde hace un año en la Marjory Stoneman Douglas High School de Parkland, nunca había visto a Nikolaus Cruz. “Esta es una escuela muy grande donde en promedio estudian 5.000 alumnos”, dijo Martin quien es ama de casa y reside con su familia en Parkland desde hace cinco años.

Nikolaus Cruz, el atacante que provocó la muerte de 17 personas el miércoles en una escuela secundaria de Florida, era un adolescente amante de las armas que había sido expulsado del liceo por razones disciplinarias.

El joven de 19 años se presentó a la hora de la salida del colegio que había frecuentado, la Marjory Stoneman Douglas High School de Parkland, con un fusil semi-automático AR-15 y gran cantidad de munición, disparando la alarma anti-incendios para atacar a los estudiantes cuando abandonaban el edificio.

Con Información de Jessika Millano.