Historias

CRÓNICA | Todo lo que se sabe de las últimas 24 horas de Martín Elías

AL DÍA reconstruyó los momentos previos de la muerte del ídolo vallenato.

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Cuando aún no cesa el dolor entre la inmensa fanaticada del ídolo vallenato Martín Elías, luego de su trágico fallecimiento el pasado 14 de abril, AL DÍA trató de reconstruir hasta donde más se logró las últimas horas del artista antes del nefasto accidente vial.

Como fuentes consultamos a varios de su círculo cercano de colaboradores, entre estos Juan K. Vega, mánager desde hacía año y cinco meses de la agrupación, y uno de sus hombres de confianza. Esto nos contó.

“Para cumplir el compromiso en Coveñas me pidió que le buscará un hotel en Cartagena. Iba a hospedarse con su esposa e hijos, y disfrutar de un día relajado antes del concierto.", contó el manager

"El Miércoles Santo tocó en una fiesta privada en Barranquilla, y a las 8 de la mañana del Jueves Santo salió para Cartagena. Se hospedó en el hotel Radisson, pues no encontró cupo en el hotel Las Américas donde en principio quería bajarse, ya que allí vacacionaba su hermano Rafael Santos. El Jueves hablamos muchas veces por teléfono, se le notaba contento y me comentó que la pasaba jugando y bañándose en la piscina y la playa con ‘Martincito’ y ‘La Purri’, como llamaba a su hija Paula Elena".

“En la tarde del Jueves Santo hizo un recorrido en una van del hotel por el Centro Histórico de Cartagena y por el sector de Bocagrande.

“A las 12 de la noche del Jueves Santo, antes de salir para Coveñas, me llamó y me preguntó que cómo estaba el evento. Le respondí que no muy bien. Entonces me dijo que si la vaina estaba floja no viajaba. Pero le recordé que nos habían pa gado $30 millones de los 50 cobrados, y que había que ser responsable. La presentación nuestra estaba programada para la una de la madrugada, pero el empresario, con el propósito de mover la venta del licor para amortizar la baja en la taquilla, me pidió que tocara de último, como cierre del espectáculo para mantener a la gente hasta el final, ya que la estrella era Martín Elías.

Era la primera vez que aceptábamos una propuesta así, porque a él molestaba cambiar los horarios, siempre quería actuar temprano, pero ese día me dijo: ‘Dele compa, que hay que cumplir’, y accedí a correr la hora de presentación. “A Coveñas llegó a las 4 de la madrugada, pero se quedó dentro del carro y durmió una hora más.

A las 5 subió a cantar hasta las 6:15. “En tarima lo vi un poco ‘ido’ al principio. Se puso unas sandalias al estilo Carlos Vives que compró en Estados Unidos. Como detalle curioso interpretó varios temas de su papá que jamás había cantado en vivo. Me pidió que incluyera en el teleprompter las canciones La suerte está echada yEl culpable soy yo.

Fue algo muy raro. También me llamó la atención unos versos muy sentidos que le improvisó a Diomedes. “Después de la presentación lo acompañamos hasta la puerta del evento, y me dijo que nos veíamos el martes en Bogotá para viajar a la presentación en Nueva York. Le mamó gallo a un amigo mío de Sincelejo, diciéndole que yo lo había invitado a Santa Marta, mientras que a él (Martín Elías) no lo sacaba a ningún lado.

Luego pidió que le buscaran a un niño que quería tomarse una foto con él. “Hasta que no le trajeron al ‘pelaíto’ para la foto no se montó en la camioneta. Esperó y complació al nene. Después de ese detalle con el niño partió rumbo al hotel en Cartagena, a reunirse con su esposa Dayana Jaimes, Martincito y Paula, a seguir disfrutando con ellos. Yo por mi parte me dirigía hacia Santa Marta”.

“Del accidente me enteré por Rolando (Ochoa). Martín salió adelante, ‘Rolan’ se lo pasa, y luego Martín lo deja atrás. R8 encuentra el accidente y lo auxilia, junto con sus conductores lo lleva al puesto de salud de San Onofre. De allí lo trasladamos en Sincelejo en ambulancia. Yo viajé junto con mi compadre (Martín Elías), lo veía mal, no podía abrir los ojos.Yo le dije que estábamos con Dios y que íbamos a salir bien de esto, me levantó el pulgar de la mano derecha y le pidió agua a la enfermera.

Esa fue la última señal de vida que me dio en los 40 minutos que duró el viaje hasta Sincelejo. Antes Martín Elías le había dicho a ‘Juanma’, el timbalero, que no lo dejará morir, que el aún quería seguir cantándole a su gente. “Yo fui el primero de enterarme de su fallecimiento junto a su esposa Dayana Jaimes. ‘Daya’ entró en shock y yo salí a abrazar a Rolando y a los muchachos para darles la mala noticia. Luego llamé a Rafael Santos a Luis Ángel, y posteriormente le dí la información a la prensa”.