Historias

ESPECIAL | Digno Palomino, el azote de los comerciantes de Fedecafé

El asesinato de un comerciante del sector sería porque se negó a entregarle cinco celulares de alta gama y $500.000 en efectivo. La Policía reactivó la búsqueda de Palomino.

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Entre los comerciantes del Mercado Turístico del Caribe, nombre oficial del centro comercial que todos conocemos como Fedecafé, situado en el corazón del Centro de Barranquilla; reina el miedo.

La causa de ese temor tiene nombre propio: Digno Palomino, el delincuente más buscado en la capital del Atlántico, y por el que se ofrecen hasta $30 millones por su captura. De acuerdo con información en poder del Gaula de la Policía, conocida por AL DÍA, el sujeto tiene a los pequeños comerciantes azotados con su tenebrosa red de extorsionistas.

En los pasillos de la edificación esto es un secreto a voces. Todos lo saben, pero nadie se atreve a hablar. Ahora la situción se ha tornado más crítica, tras el asesinato del comerciante Gustavo Adolfo Barrios Villalba, de 28 años, ocurrido a la 1:20 de la tarde del pasado 12 de agosto en su propio local de Fedecafé.

Policía Nacional

De acuerdo con las líneas de investigación trazadas por la Policía, todos los indicios apuntan a que el asesinato de este joven fue ordenado por Palomino.

La razón plena del asesinato de Barrios sería su resistencia a pagar la extorsión que le exigía el delincuente.

Este quería la entrega de cinco celulares de alta gama, más $500 mil en efectivo. “Gustavo Adolfo Barrios Villalba era una persona tranquila. Nunca dijo que lo estaban extorsionando hasta el día en que a su local llegó Bernardo Enrique Navarro Seguro, alias el ‘Gordo’, (primo de Digno Palomino recientemente capturado). Este sujeto amenazó en pleno pasillo de Fedecafé con matarlo a él y al que no pagara extorsión. Desde ese día supimos que el muchacho estaba siendo blanco de las extorsiones. Tenemos la certeza de que él había denunciado el caso en la Policía, y por ello lo mataron cobardemente, por negarse a las exigencias de los bandidos”, contó una fuente del citado centro comercial. Debido a este homicidio la Policía reactivó la búsqueda de Digno Palomino.

Fue así como el pasado 26 de agosto, en un operativo realizado por agentes del Gaula de la Policía, en coordinación con la Fiscalía, fue capturado en un inmueble del Barrio Abajo, alias ‘el Gordo’, el hombre señalado de cobrar las extorsiones a los comerciantes de Fedecafé.

Hay desbandada

A raíz de esta situación tensionante algunos comerciantes han preferido cerrar sus establecimientos. No quieren pagar, pero tampoco quieren que los maten, por lo tanto optaron por marcharse a otros lugares.

Los comerciantes de Fedecafé le han exigido a la Policía Metropolitana que aumente la vigilancia dentro y fuera de la edificacion.

“Aquí solo vemos a la Policía cuando vienen a acompañar a la Dian a realizar operativos de control de nuestra mercancía, y también cuando hacen operativos contra el robo de celulares. Nosotros no nos oponemos a eso, pero pedimos que nos protejan de las bandas criminales. Aquí reina el miedo por eso”, precisó un comerciante que solicitó reserva de su identidad por razones de seguridad.

El temor entre este gremio es tan grande que la mayoría se abstiene de hablar sobre este grave problema.

Fedecafé cuenta con 550 locales comerciales en su interior, los cuales están asediados en estos momentos por otro problema: la proliferación de ‘calanchines’, individuos que abordan a los clientes en los pasillos y los conducen a los locales.

“Hay como 50 de ellos. Les caen a los clientes, se ofrecen para arreglar celulares. Se han convertido en nuestro dolor de cabeza”, dijo otro comerciante. Los propietarios de locales pagan impuestos por concepto de Cámara de Comercio e igualmente al Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTic).

Estos locales han sido adjudicados en comodato, y cada comerciante paga por su espacio un arriendo mensual que oscila entre 350 mil y 400 mil, dependiendo de la ubicación. El mercado es administrado por Edubar.

“Nos sentimos atropellados por la Policía con esos constantes operativos. La edificación tiene muchos problemas de infraestructura. Cuando llueve el agua se mete y afecta los locales. Los tubos de desagüe se desbordan”, precisó otro, quien tampoco quiso que reveláramos su identidad.

“Sentimos mucho temor por los extorsionistas, pero también por los operativos que realiza la Dian. Queremos cambiar la imagen de Fedecafé. No nos oponemos al control de la mercancía, pero que lo hagan de manera selectiva. Que no nos metan a todos en un mismo costal. Nos sentimos estigmatizados porque la gente cree que Fedecafé es un nido de delincuentes y eso no es así. Somos padres de familia, gente honesta que realiza un trabajo legal”, precisó otro comerciante.

Sobre el tema de la extorsión en Fedecafé, concluyeron que viene ocurriendo desde hace más de seis años. A veces se calma, pero nuevamente se reactiva con la aparición de otros cabecillas de bandas delictivas, como es ahora el caso de Digno Palomino.

Este hombre fija cuotas que oscilan entre un millón y tres millones de pesos mensuales, recalcó una fuente policial. Agregó que en estos momentos hay cerca de 60 comerciantes de allí que están siendo extorsionados.