Los creadores de la canción conversaron con AL DÍA
Los creadores de la canción conversaron con AL DÍACortesía
Historias

“¿Mama, qué será lo que quiere el negro?”: la curiosa historia detrás de la canción

Protagonistas de este hit musical hablaron con AL DÍA sobre su creación.

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Una de las canciones con las que más se asocia al recién fallecido juglar Calixto Ochoa es El africano, tema que traspasó fronteras luego de que el merenguero dominicano Wilfrido Vargas le hiciera su propia versión.

Lo que muchos desconocen es que detrás de la creación de esta joya musical se esconden una serie de anécdotas e historias pocos conocidas, pero reveladoras de verdades ocultas.

Lo primero que hay que decir de la canción, prensada en Barranquilla en 1983 por la disquera Felito Records, en el LP Calixto Ochoa y su Conjunto; es que la obra no es de la autoría plena del juglar de Valencia de Jesús (Valledupar), Calixto Ochoa. La pegajosa letra es del corozalero Wilfrido Carmelo Martínez Mattos, conocido como ‘Manduquito’. La razón por la que figura el crédito de Calixto como coautor, la explicó a AL DÍA el mismo ‘Manduquito’, quien está radicado en Cartagena.

La letra es mía en su totalidad, Calixto lo que le hizo fue ponerle los arreglos musicales. Yo la tengo registrada y aparezco como su único autor literario. Este era un tema que nadie me quería grabar, y fue ‘El negro Cali’, quien mostró interés. Inicialmente le presenté un tema denominado Manduquito, que le gustó mucho; pero cuando luego escuchó El africano, ‘quedó frío’, porque estaba cargado de mucha picardía y me confesó que este sería un tema sorpresa con el que nos conocerían por todas partes”, explicó el hombre de 69 años.

 

‘LOS PICÓS ME INSPIRARON’

 

Esta premonición que lanzó Calixto Ochoa se cumplió, y el tema fue grabado por su conjunto ese mismo año (1983). Al año siguiente lo grabó Wilfrido Vargas, quien extendió el éxito por los cinco continentes. Sobre la concepción del tema el corozalero señaló que lo hizo porque según él, las mujeres colombianas apenas escuchan a un hombre hablar una lengua extranjera quedan impresionadas.

“A inicio de los 80 fuimos invadidos por los LP que llegaban de África, los cuales sonaban en los picós y me llamaba la atención que uno no entendía nada de lo que cantaban, y solo gozaba era con el ritmo. Así que empecé a decir un poco de ‘locuras’ desde el principio, y ya en el desarrollo le metí mucho picante con un negro que es inquieto y que busca una cosa rica”, declaró entre risas.

Otro que entregó detalles sobre este hit fue Eduardo Dávila Santiago, quien realizó la producción musical, pues para la época era ingeniero de sonido del estudio Felito Récord. Dávila recordó el momento exacto en qué salió al ruedo esta pieza musical.

Eduardo Dávila Santiago, ingeniero de sonido.


“Calixto iba a grabar un LP, y don Félix Butrón, que era el dueño de la disquera, le había pedido que hiciera dos canciones con el sonero Saulo Sánchez. Grabaron Las flores y El huevo, en las cuales se puede apreciar la bella voz de Saulo y la excelente digitación de Calixto en el acordeón. Tras finalizar la grabación de los dos números, don Félix sorprendió a Calixto pidiéndole un tema extra para un LP variado que tenía planeado”, recuerda Dávila. En este momento es que aparece El africano, por accidente, agrega.

Calixto no tenía nada preparado, de pronto su corista ‘Manduquito’ empieza a tararear El africano, el cual nos gustó a todos por la chispa de la letra. De inmediato Calixto agarró el acordeón, pero no encontraba las notas para acompañarlo, es por eso que la introducción es enredada, ya que aparece ‘Manduquito’ diciendo unas cosas sin sentido con una escala musical invertida”, explicó el ingeniero de sonido.

Eduardo Dávila confiesa también que captó mucha desafinación en William ‘Manduquito’ Martínez, por lo que para evitar retrasos en la producción, sugirió que el tema lo grabara una mujer, ya que no le quedaba bien a un hombre decir “¿Mama qué será lo que quiere el negro?”. Fue así como surgió el nombre de Amina Jiménez, quien había grabado con Pacho Galán.

Amina Jiménez le puso su voz a la versión original.


“Fui a Soledad y la traje al estudio para que le pusiera pimienta a la canción, y lo hizo muy bien, con mucha picardía. Al final nos quedaban unos baches que Calixto sugirió fueran llenados por un trombón, y le delegó esa tarea a Rosendo Martínez de Los Corraleros de Majagual, quien completó así la tarea”.

‘Manduquito’ coincidió con la versión de Eduardo Dávila, y agregó en la charla con AL DÍA que jamás tuvo problemas con Calixto Ochoa sobre la autoría del tema. Solo tuvo un litigio jurídico con Wilfrido Vargas, quien grabó el disco y quiso apropiarse de los derechos de autor. “Yo demandé a Wilfrido Vargas porque no me reconoció mis créditos, y jamás recibí las regalías por la comercialización de su versión. Ese caso transcendió a los medios internacionales, y tras dar la pelea, finalmente le tocó reconocerme hasta el último peso”, afirma ‘Manduquito’.

Wilfrido Martínez Mattos manifestó que tiene escrita la segunda parte, la cual tituló La contestación del negro, la cual espera sea grabada por algún genio de la música costeña. “Mama mi negro está contento/ ya juguetea conmigo, no le digas nada a mi papa/ mama el negro si me quiere, me besa y me abraza y ya no me destapa”, dice uno de los apartes del tema inédito.

 

LA INTERNACIONALIZACIÓN

 

En cuanto salió al mercado, El africano de Calixto Ochoa y ‘Manduquito’, comenzó a sonar con fuerza por toda la Costa Caribe, especialmente en Cartagena y Barranquilla. Fue en esta última ciudad en la que el dominicano Wilfrido Vargas lo escuchó por primera vez. Lo impactó de tal manera la jocosidad de la letra que se animó a hacer su propia versión. Así habló con AL DÍA el dominicano sobre el disco.

“En 1984 iba a hacer una grabación, y en el recorrido en el taxi escuché a una muchacha que decía: “Mama, el negro está rabioso, quiere pelear conmigo”. Encontré una trama interesante porque la dama termina diciendo,“¿mama que será lo que quiere el negro?”, así que le dije al taxista que esa chica era bien hipócrita; pero a la vez pensé que quién había compuesto esto era un genio, porque lograba sacar risas a quién lo escuchaba. Así que desde ese mismo instante supe que eso era un éxito asegurado, y le ordené al conductor que se devolviera a buscar el LP, para saber quién era el responsable de semejante joya”, explicó Wilfrido Vargas.

Tras descubrir que era una obra de Calixto Ochoa y su conjunto, y conocer lo importante que era esta agrupación para el folclor colombiano, el trompetista y cantante hizo la grabación en esa misma tarde. “Me demoré solo seis horas en el estudio. Al otro día estaba siendo procesada y al tercer día el tema ya estaba debutando en la emisora más importante de New York. En una semana y media ya era número uno y en 15 días podría decir que ya lo conocía el mundo entero”, dijo con seguridad el músico que incluyó en esa misma producción Abusadora, El comején, El hombre divertido y Ron pa’ todo el mundo de Dolcey Gutiérrez.

 

‘Manduquito’, el autor de la letra

 

En la contracarátula del LP Calixto Ochoa y su conjunto, que contiene el éxito El africano, aparece Wilfrido Carmelo Martínez Mattos, conocido como ‘Manduquito’, al lado del juglar Calixto Ochoa. Esto según contó el corozalero se debió al reconocimiento que le hizo Ochoa por su aporte a este álbum.

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