Se fue Luis Ángel Silva “Melón”, el Rey de la salsa

Luis Ángel Silva Nava, conocido artísticamente como Melón, tal vez el único gran sonero salse­ro mexicano, falleció al amane­cer de ayer lunes a los 85 años, a raíz de un paro cardiaco.

Melón adquirió fama en Barran­quilla a partir de 1977, cuando en pleno boom de la salsa dura grabó para el sello Fania, bajo la produc­ción de Johhny Pacheco, el long play Llegó Melón.

De este trabajo discográfico desco­llaron los temas Don Toribio, versión salsera de un clásico cubano; y Jíca­mo y salsa, en los que Melón sobresa­le por su excelente canto, dicción, so­neo e improvisación a la altura de los grandes soneros boricuas o cubanos.

En Jícamo lanzó la famosa expresión: “Yo soy el rey de la salsa y la rumba…”, que le valió este mote en su país natal.

Además de su carrera musical que desempeñó por unas seis décadas, Melón mantenía una columna perio­dística de fin se semana en el diario La Jornada de México, especializada en música, especialmente del víncu­lo de los sones cubanos con los rit­mos del país manito.

Sus inicios en la música fueron con el grupo los Diablos del Trópico, que tenía en el set de cantantes al afama­do Tony Camargo.

Antes de dar el gran paso a la salsa de la mano del dominicano Johnny Pacheco, Luis Ángel Silva mantuvo en México, a partir de 1958, la agru­pación Lobo y Melón, de corte tropi­cal, basado en la rítmica cubana que luego serviría de puntal a lo que es hoy la salsa.

Uno de sus principales éxitos con este grupo fue Amalia Batista, célebre tema del cancionero cubano.Melón también le hizo coros a Ben­ny Moré en el rodaje en México de la película Bocón, en la que el Bárbaro del Ritmo interpretó varios temas con su orquesta.

Además de Benny Moré, Melón re­cibió la bendición de otro grande de la música, su compatriota Rafael de Paz, quien el 13 de octubre de 1958 le da la alternativa para un show en la capital mexicana, y bautiza la agrupa­ción como Lobo y Melón, por lo apo­ dos de los dos lí­deres. Lobo es Carlos Daniel Na­varro, percusionista. El apodo de Melón de­vino de la forma alarga­da de su cabeza, dice sus reseñas biográficas. Luis Ángel Silva Nava nació el 2 de octubre de 1930 en el ba­rrio Santa María La Ribera, en Ciudad de México, don­de desde las 2 de la tarde de ayer se dio inicio a la vela­ción. El sepelio está fi­jado para hoy.