Carlos intentó corregir al hijo de su hermana y ella lo asesinó de una puñalada en el pecho
El hecho ocurrió este sábado a las 2:00 de la tarde en el barrio El Pozón, en Cartagena.
Tras conocerse el terrible hecho en el que una mujer mató a su propio hermano Carlos Andrés Ramos Martínez, de una puñalada en el pecho, en el barrio El Pozón, en el sector Corazón de Jesús, en Cartagena, a las 2:00 de la tarde del sábado. AL DÍA habló con los familiares sobre lo sucedido y ellos desmintieron la versión que entregó la Policía.
Según manifestaron los dolientes, Carlos estaba en la tienda. Su sobrino llegó al rato y se puso a molestar a una niña, cosa que al hoy fallecido no le agradó, por lo que lo jaló del suéter y se lo rompió. El menor de edad puso las quejas a su madre.
Cuando Ramos Martínez llegó a la casa, su hermana le reclamó por lo sucedido, lo que inició una pelea verbal entre los dos hermanos. “Solo falta que le pongas una pollera, porque quiere andar pegándole a las mujeres”, fue lo que presuntamente expresó en medio de la discusión, Carlos.
Seguidamente, le dijo a la hermana que le trajera a su hijo para pegarle, porque debía aprender a respetar. La mujer llamó a su hijo pero este no salió sino que fue hasta la cocina, cogió un cuchillo y se lo entregó a su madre.
El hoy fallecido, salió a un solar que está en frente de la casa a buscar una varita y una piedra para presuntamente pegarle a la hermana, y al acercarse a ella esta le pegó la puñalada en el pecho, pero Carlos alcanzó a pegarle con la piedra en uno de sus brazos.
El marido de la hermana llegó hasta donde estaban los dos y le preguntó a la víctima que si le había pegado, por lo que cogió una piedra para pegarle, pero uno de sus hermanos detuvo al marido de la presunta asesina, mientras que el herido se desplomó a causa de la herida que recibió.
“Él no fue quien lo mató, fui yo, fui yo”, le dijo la presunta asesina al hermano que impidió que el marido de esta le pegara con la piedra a Carlos.
Uno de los vecinos ayudó a Carlos y lo trasladó hasta el CAP de El Pozón, donde decidieron remitirlo a la Madre Bernarda, sin embargo, dicen los dolientes, que la ambulancia demoró una hora en llegar para la remisión de Carlos, lo que provocó, al parecer, que muriera en el camino, pues los médico manifestaron que llegó sin vida.
Carlos deja una hija de 7 meses, era el sexto de 13 hermanos y trabajaba en oficios varios.