¿Qué Pasa?

El terrible caso de un joven que mató de un puño en la cara a un adulto mayor

El hecho ocurrió en el barrio Por Fin, en Barranquilla.

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A Francisco Rafael Mercado Ávila, de 78 años, le llamó la atención el ajetreo que escuchó en las afue­ras de su casa en la carrera 23A con calle 84, barrio Por Fin.

El hombre de 78 años ignoró las reco­mendaciones de su hija y salió a la puer­ta de su vivienda a indagar qué sucedía.

Según testigos, a esa hora, 9 de la no­che, Mateo Levis Pérez Miranda, un jo­ven del barrio, se dirigía junto a su padre a una iglesia cristiana evangélica. “De repente el muchacho perdió el control y comenzó a correr. Golpeó a su padre, a un vendedor de petos y a mi papá”, na­rró Carmen Sofía Mercado, la mayor de los ocho hijos de Francisco.

El joven de 20 años le pegó una trompada en el pómulo izquierdo al hombre de la tercera edad y lo dejó inconsciente en el suelo. De acuerdo con Luz Estela Hernández, ma­dre de Mateo, el joven venía presentan­do hace dos semanas una crisis nervio­sa. “Nos pedía que lo oráramos porque sentía una ‘garrapata’ en la garganta y escuchaba voces”, contó la madre desde su hogar, a media cuadra de donde ocu­rrió el ataque.

Luego del incidente el muchacho tuvo que ser recluido y amarrado en su ca­sa. Mientras tanto, Francisco fue lleva­do por sus familiares al paso La Manga. Allí recobró la conciencia, le dieron unas pastillas para el dolor y le recomendaron ponerle hielo, contó la hija de Mercado.

Cuando lo llevaron de vuelta a la ca­sa de uno de sus hijos en el barrio Car­los Meisel, la situación empeoró para el septuagenario. “Decía que se sentía muy mareado, y vomitó sangre cinco veces”, detalló Rafael, otro de los hijos del falle­cido. Debido al estado decaído de salud, a las 11 de la noche de ese mismo domin­go lo llevaron a la Clínica La Asunción. El parte médico fue que tenía un hematoma en la cabeza que podía comprometer con sangre el cerebro. Por esta razón lo in­tervinieron quirúrgicamente. Luego del procedimiento pasó UCI.

“Nos dijeron que había salido bien, pe­ro mi papá más nunca despertó”, se la­mentó Carmen, su hija.

Francisco Mercado, según la familia, sufría de cáncer de colon. Su cuerpo fue llevado a Medicina Legal para determi­nar la causa real del deceso.

La familia Mercado presentó un de­nuncio ante las autoridades inicialmen­te por lesiones personales agravadas, pe­ro debido a la muerte de la víctima pasó a ser por homicidio.