¿Qué Pasa?

ESPECIAL | La trocha de la muerte en la Circunvalar

Dos mujeres asesinadas y cinco violadas en un año y cinco meses.

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Un sector enmontado atravesado por una trocha de un kilómetro de largo, que parte desde la calle 100 con transversal 43A, barrio Miramar; y llega hasta la Vía Circunvalar, se ha convertido en una zona tenebrosa en donde en un año y cinco meses han asesinado a dos mujeres y violado a cinco. Vecinos y personas que trabajan en Miramar la usan para desplazarse, en menos de diez minutos, desde la zona residencial y comercial hasta la Vía Circunvalar.

Lo hacen con la finalidad de ganar tiempo, exponiéndose a ser víctimas de criminales que se aprovechan de la soledad del sector para cometer sus fechorías. A pesar de que la zona está cercada, la gente hace caso omiso de eso y transita por la vía destapada que muchos llaman la ‘Trocha de la muerte’, por los casos de violencia, especialmente contra mujeres, que han ocurrido en casi año y medio.

VIOLACIONES

El primer caso que sirvió como detonante para prender las alarmas ocurrió el 8 de marzo del año pasado. Una joven fue violada por un sujeto que la intimidó con un cuchillo. Este fue capturado e identificado por la Policía, como Luis Gregorio Morales Calderón. De acuerdo con investigaciones de la Sijín, Morales Calderón venía violando a empleadas domésticas de casas y apartamentos de Miramar cuando salían a tomar el bus, o después que se bajaban en esa zona para dirigirse a sus sitios de labores.

“Cuando caminaban por el sector enmontado eran abordadas por este sujeto, quien las amenazaba con un arma blanca para accederlas sexualmente”, dijo a AL DÍA un investigador. Otra fuente policial explicó que desde el Hospital Metropolitano fue reportada la atención a una paciente que había sido víctima de abuso.

Los agentes se entrevistaron allí con ella, y les contó que un hombre la persiguió con un cuchillo en mano por la trocha de la calle 100 y, tras alcanzarla, la obligó a adentrarse en el monte, donde la accedió. Morales fue señalado por otras cuatro mujeres de haberlas violado en la referida trocha.

Durante las pesquisas los investigadores hallaron en la base de datos del sistema penal que Morales tenía dos anotaciones judiciales por el mismo delito: una del 23 de febrero de 2017 y otra del 11 de agosto de 2011. Un tercer registro a su nombre, del 3 de marzo de 2015, es por porte ilegal de armas de fuego.

[VER: VIDEO | Así cayó el hombre que violaba a las empleadas de servicio en Barranquilla ]

EL ASESINATO DE YOBELIS

El viernes 5 de enero de este año, a las 9:00 de la noche, fue encontrado cerca de ese sector enmontado el cadáver de una mujer afrodescendiente, que al día siguiente fue identificada como Yobelis Ramírez Valdez, de 27 años, quien estaba desaparecida desde el domingo 19 de noviembre de 2017.

Los familiares de Yobelis dijeron que trabajaba como empleada doméstica en una casa del conjunto residencial La Castellana, en el norte de Barranquilla, cerca del sitio donde encontraron el cuerpo. El 18 de noviembre ella habló con la mamá y le comentó que iba con un muchacho, con quien llevaba saliendo un par de meses, y a quien conoció por Facebook, a retirar un ce lular que tenía empeñado.

Al parecer la pareja había tenido varias peleas por celos. El 22 de noviembre, tres días después de su desaparición, el usuario de Yobelis se conectó a Facebook y le dijo a varios conocidos que no se preocuparan porque estaba trabajando en Montería. Sin embargo, los familiares no creen que fuera ella, porque “Yobelis no actuaba así y tampoco abandonaría a sus tres hijos repentinamente”. Yobelis Ramírez era natural de Marialabaja (Bolívar), y llevaba más de 10 años viviendo en Soledad.

[VER: Yobelis sí era la mujer que hallaron muerta y con signos de violencia en la Circunvalar ]

LA MUERTE DE BRENDA

Con el hallazgo del cuerpo de esta joven y las cinco violaciones ocurridas en ese paraje, las alarmas ya estaban encendidas. El caso que sirvió para demostrar que ese sector enmontado, especialmente la trocha, estaba siendo utilizado por delincuentes para cometer sus fechorías, fue el reciente de Brenda Pájaro Bruno.

Esta mujer desapareció el pasado 25 de julio tras dejar a una hija en un centro asistencial en el norte de la ciudad. Desde ese día su paradero se con virtió en un misterio tanto para su familia como para las autoridades policiales. En un trabajo de inteligencia realizado por la Sijín y el Gaula se logró triangular la última llamada que Brenda hizo desde su celular. El resultado fue el sector enmontado de Miramar y la trocha que desde ese barrio conduce a la Circunvalar.

Se organizó un equipo de búsqueda en la zona, pero nada, no encontraron nada, hasta que el lunes 27 de agosto, al filo de la medianoche, vigilantes del sector alertaron a la Policía sobre el hallazgo de un cadáver a unos 25 metros de la trocha. Se trataba de Brenda Pájaro, quien fue identificada plenamente por su carta dental.

“La solución es que las autoridades cerquen todo ese lote enmontado que se ha convertido en guarida de toda clase de delincuentes. Y que la gente, especialmente las mujeres, dejen de transitar solas por esa trocha”, subrayó Leyda García, una empleada doméstica que trabaja en Miramar, y quien dejó de meterse por esa vía destapada para no correr riesgos.

[VER: Cuerpo hallado en Miramar es el de Brenda Pájaro Bruno: Medicina Legal ]