A piedras fue asesinada mujer venezolana
Entre los primeros sospechosos del crimen está el marido.
Lo que podría ser un nuevo caso de feminicidio sucedió la madrugada de este domingo, cuando una mujer de nacionalidad venezolana fue encontrada sin vida en un callejón solitario y aparece como primer sospechoso del homicidio su compañero permanente, persona que fue la última con quien vieron a la mujer.
El crimen se produjo en la calle 14 con la carrera 30, barrio Divino Niño del municipio de Maicao. En los alrededores del cuerpo fueron halladas piedras y ladrillos y a la mujer se le observa una lesión en la cabeza y se cree que fue provocada con arma contundente que pudo ser un objeto de los encontrados en su entorno.
Tras la diligencia de inspección y levantamiento del cuerpo por parte de los investigadores del CTI de la Fiscalía, se conoció que la mujer asesinada respondía al nombre de Lisbeth Coromoto Nava Wilches, de 46 años, nacida en Venezuela, quien llevaba varios meses en Colombia y había permanecido siempre en Maicao, donde le llegaron otros familiares como sus hijos.
Lisbeth Coromoto fue vista la tarde y la noche del sábado con un hombre con el que mantenía una relación marital y quien igualmente es nativo del vecino país. Allegados a la mujer asesinada dijeron que ellos se habían mantenido siempre muy preocupados con la relación que ella estaba llevando, pues no era la mejor y siempre estaba en permanente confrontación con su marido. Pese a esto, tenían en común un ingrediente peligroso y era el trago al que acudían con relativa frecuencia, como lo hicieron el día sábado en la noche y hasta la madrugada.
El marido de la ahora occisa reconoció haber estado con ella, y además haber llegado cerca de las 5 de la mañana a la casa, pero lo hizo fue para recoger unos documentos, pues ya salía de la casa. El hombre, hasta ayer, no tenía una acusación formal de homicidio en su contra, pero se había convertido en el principal sospechoso de la muerte de la venezolana.
