Consejos para evitar que la chispa se apague después del matrimonio

A medida que pasan los años, las exigencias de la vida diaria pue­den convertir el matrimonio en un reto desafiante. Una lectora nos escribió al respecto lo si­guiente: “Llevo casada varios años y a pesar de que las cosas funcionan bien en el matrimonio siento que nuestra vida sexual ha decaído. ¿Cómo se lo­gra mantener la chispa y la energía de los primeros días de casados?”.

Primero que todo deben recordar que la rutina y las responsabilida­des de la vida cotidiana hace que las parejas muchas veces se distancien sexualmente.

Sin embargo, con estos pequeños consejos podrán mantener la pasión encendida como esos primeros días de casados, cuando incluso ir juntos al supermercado era una aventura emocionante.

TIEMPO PARA DIVERTIRSE

Puede que parezca extraño progra­mar un momento de diversión, pero si no lo hacen lo más probable es que no ocurra. Los expertos dicen que es muy importante poner a tu cónyuge primero al organizar tus compromi­sos, porque es demasiado fácil colo­car inconscientemente a tu pareja en la parte inferior de la lista.

Intenten establecer límites con su tiempo y asegúrense de programar una noche para mantener la diversión. Con­viértanlo en una prioridad marcando la fecha y la hora, contratando a una niñe­ra y honren ese compromiso, al igual que lo harían con cualquier otra franja de tiempo en sus calendarios.

REVIVAN LO QUE LOS UNIÓ

En la época de novios pasaban el tiempo realizando actividades de ocio muy divertidas. ¿Qué les gusta­ba hacer entonces? ¿Correr? ¿Llevar el perro al parque? o ¿Probar nuevos restaurantes?

Sin importar cuáles fueran esas acti­vidades, es importante intentar revivir esos momentos. Mantener un vínculo a través de algo que les gustaba disfrutar a los dos y recrear esos primeros días los hará sonreír.

ESCAPEN JUNTOS

Todas las parejas necesitan un tiempo alejados de la rutina diaria. No necesitas unas vacaciones tropicales, aunque eso sería fantástico, para recordar los bue­nos momentos.

Un simple cambio de escenario en forma de excursión de un día, puede estimular la sonrisa, generar nue­vas conversaciones y acercarlos más en la intimidad.

Si no pueden realizar una escapada así, modifiquen sus rutinas habitua­les, pues a veces los pequeños cam­bios y las salidas cortas pueden ser suficientes para cultivar la vitalidad.