¿Qué Pasa?

Esta tierra no es mía: el sonido raizal del Sexteto Tabalá en los picós

Canción protesta palenquera que retumba en la verbena.

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Para Rafael Cassiani Cassiani, fundador, director y primera voz del Sexteto Tabalá, la cosa está bien clara: la música en Colombia nació en San Basilio de Palenque; y no es para menos, porque en esta tierra, símbolo de la libertad en América y sinónimo de musicalidad, se han incubado un sin número de expresiones que hoy son el aporte cultural de San Basilio al mundo.

Palenque es un pedazo de África en Colombia, una veta inagotable de música, que durante siglos ha preservado celosamente su herencia, una de las más grandes expresiones del folclor y la identidad cultural del Caribe Colombiano. En esta tierra ancestral, situada a 49 km de Cartagena, el tambor es una religión, y agrupaciones como el Sexteto Tabalá la han convertido en un punto de referencia de nuestra música tradicional popular.

El Sexteto Tabalá se crea en la década de los 30, y sus integrantes originales fueron Eusiquio Arrieta, Martín Cassiani, Pantaleón Salgado, Martín Cassiani Cáceres, Federico Cáceres, José Valdez Simanca y Miguelito Valdez Cassiani, trabajadores de El Batey, ingenio azucarero del corregimiento de Sincerin (Arjona), donde aquellos palenqueros conocieron a muchos jornaleros cubanos.

Por aquellos días la demanda del aguardiente y panela cimentaron el emporio Vélez-Daniels, que impulsaron la explotación de azúcar en la región, atrayendo jornaleros de todo el Caribe, entre ellos duchos y festivos cubanos que introducen la clave y el formato de sexteto.

Surge así, de la tradición afrocubana y la música nativa palenquera el Son Palenquero, siendo Tabalá su más grande representante, cuatro generaciones que han construido un cancionero folclórico que recoge cantos de más de un siglo.

Esta Tierra no es mía, es el tema icónico de esta agrupación que comenzó presentándose en fiestas del pueblo y pasó a convertirse en una de las más grandes exponentes de la música colombiana.

En la cultura de palenque el picó y la verbena tienen un lugar especial. Junto a Barranquilla y La Heroica constituyen las capitales de este sistema de música, en el que Tabalá es sin duda una de las grandes leyendas vivientes. En opinión del investigador Sidney Reyes, Palenque es uno de los grandes epicentros picotero de la región, especialmente en junio y diciembre, plaza fuerte de picós como: El Conde, El Guajiro, Supersónico, El Judío, El Sabor, El Antillano, El Perro, El Huracán, El Timbalero y Son Africano, que programaban Esta Tierra no es mía, canción a la que pocos picós tuvieron acceso y se volvió el himno de los barrios afros de Barranquilla.

Para Reyes la comunidad Palenquera es un termómetro que mide el carisma de un picó, agrega que la canción fue escrita por el maestro Rafael Cassiani, quien quiso hacer un préstamo que le negaron. Al llegar a su casa se inspiró y dijo: “Esta casa no es mía, es de la nación”.

El repertorio de sexteto recoge canciones de más de 100 años que empezaron a ser conocidas mundialmente en 1996, cuando Lucas Silva luego de verlos en el documental Yurupary, dirigido por Gloria Triana, decide apostarle y producirlos.

Esta Tierra no es mía es la historia de la pérdida del territorio palenquero, que desde tiempos coloniales le han sido usurpadas con diferente pretextos legales. El canto a una tierra que sí es de los palenqueros.

Por Jhonatan Cantillo