Historias

Así era "Pío", el hincha incondicional que murió cuando iba a ver a la Selección

Pioquinto murió haciendo lo que más le gustaba: viajar por carretera y acompañar a la tricolor.

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“Cómo puede cambiar la vida en un abrir y cerrar de ojos”, es uno de los mensajes que le dejó una persona cercana en el perfil de Facebook. La vida de un verdadero hincha de la Selección, que iba acompañado por su familia, terminó de manera trágica en la mañana de este martes, cuando su vehículo impactó contra un camión cisterna que venía en dirección contraria, en jurisdicción de Sitionuevo (Magdalena), en la Troncal del Caribe. [ Ver: El trágico viaje de cuatro hinchas que venían a Barranquilla para ver a la Selección ]

Se trata de

Pioquinto Carvajal Lozano

, de 47 años y natural de San Andrés (Santander), quien conducía un Chevrolet Spark GT rojo con el que acostumbraba a viajar por las carreteras del país. Una maniobra de adelantamiento habría sido la causa del accidente, según las primeras versiones de los investigadores de criminalística de la Seccional de Transito y Transporte.

Pioquinto perdió la vida haciendo lo que más le gustaba: viajar por carretera y acompañar a la Selección. En sus redes sociales se puede dimensionar el amor y la pasión con los que seguía al equipo.

Vestía la camiseta o la gorra a donde iba y su última foto de perfil, paradójicamente, fue una imagen de los escudos de Colombia y Uruguay, el partido que no se quería perder. Ya tenía sus entradas en la localidad Norte Alta del Metropolitano.

Pio, como le decían sus seres queridos, era un tendero reconocido y querido en el sector de La Cumbre, de Floridablanca (Santander). Desde mayo del 2002, cuando inauguró

su local ‘Tienda & Licores San Pío’

, en la Calle 29 con 5ta este, organizaba verdaderas fiestas con sus clientes, proveedores y amigos cada vez que jugaba la tricolor.

Su negocio era próspero, instalaba pantallas gigantes y hasta ofrecía a los hinchas WiFi gratis y la opción de pagar con tarjetas débito y crédito. Era común ver el sitio completamente lleno en cada encuentro, fuera del campeonato nacional, de las ligas del mundo o del Atlético Bucaramanga, su otro gran amor.

El próspero negocio que manejaba le permitió a Pio disfrutar del sueño de cualquier hincha: asistir a un mundial de fútbol de Brasil 2014.

En el 2013, cuando compró su nuevo vehículo, consiguió viajar por su cuenta a Barranquilla para ver la recta final de la eliminatoria. Ahí comenzó a tejerse el sueño, cuando logró armar un grupo de familiares y amigos que viajaba para ver a la selección en el Metropolitano. Tenían su propio “trapo” y alentaron a los dirigidos por Pékerman hasta Brasil.

Hinchas, vecinos y familiares de Pio del barrio La Cumbre.

Presentes en Brasil.

Las fotos de su viaje a Brasil 2014, junto a hinchas alemanes, japoneses, paraguayos, gringos y brasileros, dan cuenta de la felicidad de quien ha cumplido un sueño.

Viajar era otra de sus pasiones. Junto a su esposa Luz Stella Ortiz y sus dos hijos, además de clientes y amigos, tenía como costumbre conducir por carretera. Valle, Santander, Barranquilla, Santa Marta, el eje cafetero, el Tolima, fueron algunos de sus destinos.

Los vecinos de La Cumbre, familiares y clientes no salen de su conmoción tras la partida de Pioquinto. A su perfil y al de su esposa siguen llegando mensajes de condolencia y solidaridad con la familia.

Luz Stella, su esposa, se recupera de heridas en los brazos y sus hijos de 11 y 16 años se recuperan de traumas leves en la Clínica Campbell de Barranquilla, donde permanecen bajo observación. Paz en la tumba de este verdadero hincha de la selección.