¿Qué Pasa?

El capo ‘Castor’ cayó celebrando el cumpleaños de su esposa: Policía

Autoridades colombianas y venezolanas detuvieron en un lujoso hotel de Maracaibo a Jorge Eliécer Díaz Collazos, uno de los dos hombres más buscado de Barranquilla.

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Bien vestido, con un reloj de pulso bañado en oro y ultimando detalles para la celebración del cumpleaños de su pareja, cayó en Maracaibo, en poder de las autoridades venezolanas y colombianas, Jorge Eliécer Díaz Collazos, alias Castor, uno de los dos hombres más buscado por la Policía Metropolitana de Barranquilla por estar ligado principalmente al tráfico de estupefaciente, pero con un amplio recorrido en delitos como desplazamiento, descuartizamientos, extorsiones, amenazas y tráfico de armas.

Fuentes de la Policía informaron que alias Castor fue detenido en un hotel de lujo de la ciudad venezolana, sitio en el que aparentemente se había hospedado para estar al lado de Dinelys Ruiz, la madre de sus dos hijos y quien había viajado desde la capital del Atlántico hacía unos días.

Esta mujer ya había sido noticia meses atrás cuando declaró ante el periódico AL DÍA que su esposo quería entregarse a las autoridades, pero que era la propia Dijín la que lo impedía. Casualmente, este grupo policial fue el que se trasladó a Venezuela para liderar el operativo de captura del narco.

“Acá hay muchos interesados en que él no se entregue… Él se quería entregar desde hace mucho tiempo, yo tengo pruebas de eso, tengo prueba de los encuentros y negociaciones con fiscales. Pero la Dijín siempre pone trabas, no quieren que se entregue, ellos quieren llenarse la boca diciendo que lo agarraron”, expresó Ruiz, en diálogo anterior con el periódico. (Ver nota sobre la carta).

Uno de los investigadores que actuó ayer en el operativo de captura señaló que el capo hizo un gesto inicial con sus manos, en las que empezó a abrir y cerrar los puños, lo que denotaba algo de ansiedad. Pero luego, cuando le estaban leyendo los derechos del capturado, cruzó los brazos a la altura del pecho, en una actitud defensiva.

Luego de la identificación y la lectura de la notificación que tenía en su contra, los uniformados de Colombia y los de Venezuela procedieron a conducir a Castor hasta un vehículo oficial.

Seis años tardaron las autoridades policiales tras la pista de este hombre, socio de Digno Palomino Rodríguez, el otro personaje del ámbito criminal local y con quien Castor compartía el mando de Los Costeños, la temible banda que domina el negocio de la venta de droga en Barranquilla y su área metropolitana.

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