¿Qué Pasa?

Elvis fue a buscar trabajo y encontró la muerte

La mujer de padres colombianos y su pareja de padres Venezolanos tenían dos años de estar juntos y decidieron huir de la cruda situación por la que atraviesa aquel país, pero se encontraron con la peor tragedia posible, la muerte.

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El pasado 27 de abril, en el barrio Blas de Lezo en Cartagena, se desplomó un edificio en construcción que dejó 7 muertos y 26 heridos. Las lágrimas corrían por las mejillas de Dolimar Aycardi, al escuchar el nombre de Elvis Barroso Pitaúa, de 35 años, uno de los cuerpos que permane­cía en la morgue de Medicina Le­gal tras haber sido hallado entre los es­combros que dejó el derrumbe.

Ver:el trágico derrumbe de un edificio en Cartagena ha dejado 7 muertos y 26 heridos

Elvis Barroso, de nacionalidad venezolana, fue identificado por su com­pañera sentimental gracias al tatuaje en forma de cara que este tenía en su bra­zo izquierdo.

Aycardi entre sollozos y con la voz que­brada comentó que lo más triste de todo esto es que él murió enojado con ella. La pareja tenía frecuentes discusiones porque Barroso no salía conseguir trabajo. “Yo me desesperaba al ver que él no sa­lía a buscar trabajo porque me daba mie­do saber que no teníamos nada porque estoy embarazaday cuando me enteré de que había encontrado me alegré, sin embargo, seguíamos molestos porque éramos orgullosos”, afirmó la mujer.

Luego de las insistencia de su mujer, Barroso le pidió ayuda a Cleider Bello, un amigo que vive en el mismo sector el Guarapero del barrio El Pozón. “Chamo, ¿tú tienes algo por ahí para mí? Mira que estoy quieto y tengo a la mujer embarazada, lo que sea”, indicó Barroso, quien según Bello, se lo expresó de manera desesperada el pasado 21 de abril.

Elvis accedió a ser el ayudante de Be­llo Ramos y empezó a trabajar al día si­guiente hasta las 2:00 a.m., de ese sábado. El lunes retomaron sus labores hasta el jueves en la mañana, cuando ambos salieron de sus casas y se encontraron en el segundo piso de la edificación,lu­gar donde estaban trabajando la plome­ría de los apartamentos.

Cerca de las 10:30 de la mañana del trágico jueves 27 de abril, Bello sin­tió un pequeño temblor en el lugar de trabajo, por lo que le dijo a Elvis que ya regresaba, que iba a buscar agua. “Es­to lo hice para no alarmarlo”, afirmó el so­breviviente.

Sin embargo, Bello Ramos bajó a ver qué sucedía y se encontró con que la es­tructura tenía un tremendo agujero, lo que le causó preocupación, por eso re­gresó al segundo piso, encontró a Elvis acostado boca arriba en el suelo y le dijo, “Marica, no te duermas así, que si te ven dormido te van a llamar la atención. Además esta vaina se puede caer”, a lo que Ba­rroso Pitalúa le respondió “qué va cha­mo, esto qué se va a caer”. Sin embargo Bello le dijo que no se confiara porque el edificio era hecho por hombres.

Bello Ramos volvió a bajar a buscar algo que necesitaba, cuando de repente es­cuchó el estruendo de la ruptura de una viga, subió corriendo donde se encontra­ba Elvis gritándole que corriera que se iba a caer el edificio, pero no alcanzó a avisarle,porque todo colapsó en cues­tión de segundos.

Bello alcanzó a lanzarse desde el segundo piso por una de las ventanas del edificio y quedó debajo de una pared que se derrumbó, aunque afortunadamente no le pasó nada grave, solo raspaduras y moretones en una de sus piernas.

Desde ese momento y hasta las 2:30 de la tarde de ayer, Dolimar permaneció en Medicina Legal, con la esperanza in­tacta de encontrar con vida a su esposo.

Baroso estaba repor­tado como desaparecido, en ningún centro médico daban razón de él.

La mujer de padres colombianos y su pareja de padres Venezolanos tenían dos años de estar juntos y decidieron huir de la cruda situación por la que atraviesa aquel país, pero se encontraron con la peor tragedia posi­ble, la muerte. El resto de los fallecidos hasta el momento son Javier González Salas, Esteban Salas Correa, Yesid Can­tillo Suárez, Rafael Mendoza Díaz, Ed­gar García Quintana, Manuel Quintana, Omar Mendoza Bello y Jaime Banquez.