¿Qué Pasa?

Hurto, microtráfico y homicidio, las 3 tareas del general Alarcón

El nuevo comandante de la Policía dio a conocer su estrategia de trabajo.

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Tres misiones le encomendó el alcalde de Barranquilla Alejandro Char al nuevo comandante de la Policía Metropolitana, brigadier general Ricardo Alarcón Campos, a su llegada a la ciudad para el proceso de empalme con el comandante saliente de la institución, general Mariano Botero Coy.

Estas tareas, según lo mencionado por el alto oficial que llega al cargo, están relacionadas con la disminución de los hurtos en diferentes modalidades, la erradicación del negocio del microtráfico y la reducción del homicidio que, si bien ha mostrado una tendencia a la baja en los últimos años en la capital del Atlántico, se pretende que llegue a porcentajes como el de Bogotá, en donde existe una tasa reducida por cada 100 mil habitantes.

Ricardo Alarcón Campos estuvo ayer en las instalaciones de esta casa editorial en compañía del comandante saliente y quien asume como nuevo jefe de la Regional 8 de la Policía, general Mariano Botero Coy, y el jefe de la Oficina para la Seguridad y Convivencia Ciudadana del Distrito, Yesid Turbay Pereira.

En diálogo con el director de esta casa periodística, Marco Schwartz, Alarcón Campos sostuvo que su misión iba a estar encaminada en esas “tres preocupaciones fundamentales que tiene la Administración”, pero además se buscará tener un acercamiento con la comunidad para mejorar los canales de comunicación con las personas.

“El hurto está afectando a varias ciudades capitales a nivel nacional y Barranquilla no se escapa a ese flagelo. El delito del microtráfico tiene una trascendencia fundamental en todas las ciudades, se manejan jurisdicciones, se maneja distribución y alrededor de este delito se desprenden otras situaciones como homicidios, desplazamientos urbanos, expropiaciones ilícitas… Ante estos delitos hay una estrategia a nivel nacional, pero en el caso de la Metropolitana de Barranquilla hay una matriz operacional para enfrentar a estas estructuras que tienen este negocio. La conoceremos en su momento y también vamos a continuar con ella”, expresó el nuevo comandante.

En cuanto al homicidio, Alarcón señaló que acogería la estrategia desarrollada en los años de misión al frente de la Policía Metropolitana del general Botero que “llevó a Barranquilla a estar por debajo de la media nacional, que está sobre 25 o 26 homicidios por cada 100.000 habitantes, y Barranquilla debe estar alrededor de los 22 o 23 asesinatos por cada 100 mil habitantes”.

“El reto es lograr bajar a ese porcentaje a menos homicidios comenzar aproximarlo a las grandes capitales como Bogotá”, indicó.

Colaboración ciudadana

Otra de las consignas del nuevo comandante, según lo expuesto en el encuentro con este medio, es tener mayor acercamiento con la ciudadanía para escuchar los problemas que los aquejan. Para ello citó mantener una “coordinación con todas las autoridades”, con el fin de llegar a cada uno de los rincones de Barranquilla y su área metropolitana, zona de vigilancia del comando.

El general Alarcón y el general Botero Coy se detuvieron además a analizar la situación que ocurrió el fin de semana anterior cuando se presentaron dos casos de linchamientos, en distintas zonas de la capital.

Sobre el particular, el general Botero dijo que las personas que toman justicia por sus propias manos “pueden ser personas reconocidas dentro de la comunidad como buenas, pero a la vista de las autoridades son homicidas y el peso de la ley tiene que caer sobre ellos”.

A su turno, el general Alarcón manifestó que hay que “revisar qué es lo que está fallando, no es un problema de Barranquilla, es un problema de todas las ciudades del país. Eso no puede suceder, no puede pasar y la comunidad no puede perder de vista que quienes están representación del Estado, que quienes están en representación de la autoridad, son quienes portamos este uniforme”.

Ante los casos, anunció una “campaña pedagógica en toda la ciudad para que el ciudadano aprenda a respetar y a conocer los procedimientos policiales”.

Tarea de empalme. En cuanto al trabajo de empalme entre los dos comandantes, el jefe de la Oficina de Seguridad y Convivencia Ciudadana del Distrito, Yesid Turbay, destacó que el perfil de los generales “es muy similar” lo que facilitará el trabajo inmediato del general Alarcón.

Añadió que desde la dependencia distrital se le ofrecerá toda la información correspondiente en materia de criminalidad de cada uno de los sectores de la ciudad, en el sentido de que suelen ser diferentes.

“Tenemos información sobre lo que pasa en el norte de la ciudad, lo que pasa en el sur. Para la administración es muy importante proteger la tranquilidad de nuestra comunidad, en los centros comerciales, parques, restaurantes, poder mantener esa tranquilidad”, expuso Turbay.

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