¿Qué Pasa?

Policía investiga denuncia sobre supuesta agresión policial a joven en Santo Tomás

La víctima perdió varios dientes y su rostro fue desfigurado a raíz de los golpes. Policía aseguró que investiga la situación para determinar responsabilidades.

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La Policía del Atlántico inició una investigación a raiz de una denuncia interpuesta, según la misma autoridad, por la familia del joven Romario Hernández, 23 años, al que supuestamente uniformados lo habrían agredido en el municipio de Santo Tomás (Atlántico).

La agresión se habría registrado la semana anterior durante la celebración de la Guacherna Gay en la población, cuando el joven se movilizaba en una motocicleta que no tenía placas, por lo que uniformados que patrullaban la zona procedieron a deternlo, según informó una persona allegada a Hernández, que prefirió omitir su identidad.

“Él les dijo que era que se le había caído la placa y no la había puesto, pero que la tenía en la casa. Aun así lo detuvieron, se lo llevaron para la estación y allá le dieron duro, le tumbaron los dientes y lo golpearon todo”, sostuvo la fuente.

Incluso, el allegado del joven aseguró que varios agentes llegaron a su casa a “ofrecerle $3 millones para que no dijera nada”.

AL DÍA contactó al coronel Alfonso Reyes, comandante operativo de la Policía Departamento Atlántico (Deata) para indagar qué fue lo que ocurrió en este caso.

El oficial señaló que están en curso las investigaciones pertinentes para determinar quiénes son los responsables del estado en el que quedó el muchacho, si fue la comunidad o los uniformados.

“Nuestros agentes atendieron el llamado de la comunidad sobre un sospechoso que transitaba en una motocicleta armado, pero antes de que los policías atendieran la emergencia la comunidad estaba atacando al muchacho porque pensaban que iba a cometer algún ilícito. Cuando nuestros uniformados llegan, rescatan al joven y lo ingresan a la estación. Estando allá, el joven intentó escapar y fue necesario el uso de la fuerza por parte de los agentes para reducirlo y evitar que saliera. Después llegó la familia del joven y señalaron que los uniformados le habían causado las heridas en boca y cabeza, y fue trasladado a un centro asistencial para que fuera atendido”, señaló el coronel Reyes.

Según el comandante operativo del Deata, a Hernández le fue “encontrada” el arma blanca.

Entretanto, Romario Hernández debió ser sometido a varias intervenciones quirúrgicas para corregirle el maxilar superior que resultó bastante afectado.

Con información de: Diana Navarro.