Tres delitos le imputaron a exdirectivo de la firma Inassa
El tumbe, según la Fiscalía, sobrepasa los 29 mil millones de pesos.
En una audiencia virtual la Fiscalía le imputó ayer tres delitos al expresidente de la firma Inassa, Edmundo Rodríguez Sobrino, quien está siendo judicializado por la justicia colombiana por la presunta apropiación de multimillonarios recursos de la empresa de servicios públicos de Barranquilla Triple A.
El abogado de Rodríguez Sobrino desde el consulado de Colombia en España escuchó al fiscal José Gilberto Romero Vázquez argumentar porque el ente investigador considera que Rodríguez Sobrino es responsable de los delitos de: falsedad en documento privado, administración desleal y enriquecimiento ilícito.
A grandes rasgos la tesis de la Fiscalía es que Rodríguez Sobrino abusó de su cargo como presidente de Inassa y, en acuerdo con directivos de Triple A, entre 2012 y 2015, se valieron de contratación, ordenes ficticias y movimientos de capital a través de empresas varias, para apoderarse de más de $29 mil millones que debían ser invertidos por Triple A en beneficio de los barranquilleros.
Al término de la diligencia, que se cumplió en el Palacio de Justicia de Barranquilla, y fue presidida por el juez segundo penal municipal con funciones de control de garantías, José Gilberto Romero Vásquez, el imputado, Rodríguez Sobrino, por intermedio de su abogado, Mauricio Marín, no aceptó los cargos.
El apartamento lleno de plata
En junio de 2016 la presidenta regional de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, tomó la decisión de separar del cargo de Inassa en Colombia a Edmundo Rodríguez Sobrino, quien además fungía como presidente de la Junta Directiva de Triple A.
Inassa, filial de la empresa Canal Extensia, que a su vez pertenece a Canal Isabel II, es dueña en alto porcentaje de Triple A.
En junio de 2017 la Fiscalía incautó 262.000 euros (unos $860 millones) en un allanamiento al apartamento de Edmundo Rodríguez Sobrino, en el norte de Barranquilla.
En aquel momento la Fiscalía indicó que el apartamento se encontraba desocupado desde hacía dos meses, pero agentes ingresaron y en una caja fuerte localizada en una de las habitaciones encontraron los fajos de moneda extranjera.