Por buscar una pelota de tenis, barranquillero murió en Polonia

• Marcel Joseth Polo Lara, de 24 años y oriundo de Barranquilla, falleció en un lago de Zielonk, Varsovia, tras buscar una pelota de tenis.
• El cuerpo del joven fue encontrado flotando minutos después de lanzarse al agua, mientras sus amigos esperaban su salida.
• Su familia, en Facatativá, Cundinamarca, enfrenta la difícil tarea de repatriar su cuerpo y los altos costos que implica.

En Zielonk, Varsovia, la tragedia golpeó a la familia de Marcel Joseth Polo Lara, un joven barranquillero de 24 años, que perdió la vida en un trágico suceso mientras disfrutaba de un día junto a sus amigos.

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Todo comenzó con una búsqueda inocente, una pelota de tenis que había caído al frío lago, pero lo que siguió fue una secuencia de eventos que llevó al fatal desenlace.

Fue el pasado martes 2 de abril cuando Marcel, junto a ocho amigos, se aventuró a este lago en la localidad de Zielonk. La idea era pasar un momento agradable, disfrutando del aire libre y la compañía mutua. Sin embargo, en un instante, la diversión se tornó en angustia cuando Marcel se sumergió en busca de la pelota y no volvió a emerger.

Sus amigos, en un estado de expectación, aguardaron su salida del agua, pero minutos después, el cuerpo de Marcel fue encontrado flotando en la misma zona. La rápida intervención de las autoridades locales permitió su rescate y traslado a un centro asistencial cercano, pero lamentablemente, los esfuerzos médicos resultaron infructuosos.

Rafael Camargo, tío de Marcel, compartió con EL HERALDO cómo la trágica noticia llegó a más de 9.000 kilómetros de distancia, sumiendo a la familia en el dolor y la incertidumbre. "Se le presentó una oportunidad con unos amigos en Polonia a principio de marzo, fue a averiguar cómo era la situación. Los pelaos le informaron todo y se quedó allá un rato tratando de ubicarse", relató.

El relato de lo sucedido ese fatídico día aún es motivo de conversación entre los allegados. "En una de esas se fue quedó con sus amigos a pasear en los lagos famosos allá de Polonia y no sé por qué entró a este lago, dicen que jugando con una pelotica de tenis. La fue a buscar y el frío le entumeció las piernas. Se desapareció de la vista de sus compañeros", agregó Camargo.

El dolor se hace aún más agudo al recordar cómo recibieron la noticia de su fallecimiento. Una llamada que inicialmente parecía ofrecer esperanza terminó por confirmar la pérdida de Marcel. "Le dio un paro cardiorrespiratorio y murió el muchacho", lamentó Camargo.

Para la familia Polo Lara, residente en el municipio de Facatativá, Cundinamarca, la pesadilla apenas comienza. La tarea de repatriar el cuerpo de Marcel para brindarle una despedida digna en su tierra natal se ha convertido en un desafío lleno de obstáculos, especialmente económicos. El hospital les ha otorgado tres días para ubicar una funeraria y gestionar la repatriación, un proceso que implica altos costos que la familia no puede afrontar por sí sola.

"Hemos hablado con la Gobernación de Cundinamarca, congresistas, Alcaldía de Bogotá, todos nos dan aliento, pero nadie habla de dinero", compartió Camargo, refiriéndose a los esfuerzos desesperados por obtener ayuda financiera para repatriar a Marcel.

En medio del dolor, el recuerdo de Marcel se erige como un faro de bondad y virtudes. "Era un muchacho ejemplar. Trabajador, caballeroso, no tomaba, bondadoso, respetuoso, un bailarín, si te dijera todos los adjetivos de este muchacho, no lo creerías", expresó con voz entrecortada su tío Rafael.

La vida de Marcel estaba llena de sueños y proyectos truncados. Estaba previsto que regresara en los próximos días para tramitar su permanencia legal en Polonia.