¿Qué provocó la pelea entre el hombre y una mujer en un bus de Sobusa?
No hubo pronunciamiento oficial por parte de la empresa de transporte público ante la conducta del conductor. Testigos presenciales, que solicitaron anonimato, contaron sus versiones de los hechos.
En Barranquilla se ha generado un amplio debate por cuenta de un hecho de intolerancia que se registró este 22 de diciembre, cuando un bus afiliado a la empresa Sobusa fue el escenario en el que un hombre y una mujer pasaron de las agresiones verbales a las físicas.
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Todo comenzó, según la versión de varios testigos presenciales, dos de ellos consultados por AL DÍA, cuando hubo una confusión entre la ruta que tomaría el bus y la que la mujer esperaba que tuviera.
Entonces, ella procedió a reclamar al conductor del vehículo, quien desde el timón optó por "una actitud peleonera y desafiante" para con la mujer, a lo que ella respondió con carácter: 'hágame el favor y me respeta'.
La mujer también le dijo que se sentía 'mangoneada' por el conductor, pues antes de subirse ella preguntó si pasaba por el lugar al que ella debía llegar, a lo que el chofer asintió.
Pero posteriormente le dijo: “Yo para allá no voy, ya te dije, yo para allá no voy”. A esto, la mujer respondió: “No, es que yo no le estoy obligando a que vaya, pero no tiene por qué mangonearme. Hágame el favor y me respeta”.
La pelea que terminó en agresiones
Los pasajeros observaban la escena en silencio. Todos tomaron una posición neutral en el debate, hasta que un hombre que se situaba en la parte trasera del bus intervino. “¡Ya no le digas más nada, chofer! Ella lo que quiere es problema, no le digas más nada”.
La señora reaccionó: “¡Cállese la boca, cállese la boca! No sea sapo”.
El intercambio de palabras no se detuvo. Ya no era con el conductor, sino con el otro hombre.
Llevada 'por un empute grande', según describió una testigo en una versión voluntaria a este medio, la mujer decidió abandonar el bus. Entonces llega la violencia en forma física.
“Las mujeres tienen que respetarme pa'que yo las respete”, le dijo el ciudadano. Esa fue la gota que rebasó la copa. Cuando la señora va a bajar, le da un golpe con su mano derecha en el rostro.
El hombre reacciona con violencia y también la golpea en varias oportunidades, lo que provoca la intervención de todos los presentes en el interior del bus.
