¿Qué Pasa?

Utilero de Junior, herido de un balazo en su residencia

Léider Frías está fuera de peligro. Policía maneja dos hipótesis.

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La noche del domingo Léider Frías Trillos, utilero del Junior de Barranquilla, era el anfitrión de un asado que organizó en su residencia para festejar el cumpleaños 17 de uno de sus seis hijos. A la 1:15 de la madrugada, cuando la celebración estaba en pleno furor, fue interrumpida por dos sujetos armados que llegaron a atracar. La casa de la fiesta está situada en la calle 44D No. 25-82, barrio Villa Muvdi, en Soledad.

“Estábamos como 12 personas en la terraza compartiendo con mi hijo, que juega de volante creativo en el Junior Sub-20 y unos amigos de él. Cuando llegaron estos tipos en una Pulsar roja con un revólver en la mano y empezaron a quitarnos los celulares. Todos los entregamos y nos metieron a la sala”, relató ayer Frías al programa radial Los Dueños del Balón, de Antena 2 Barranquilla.

Frías, de 37 años, contó que cuando estaban todos adentro, cerró la puerta y se trenzó en una pelea a puño limpio con uno de los dos delincuentes que estaba desarmado. “Cayó en el suelo y desde afuera el conductor de la moto disparó por la ventana y me hirió”, dijo.


Léider Frías Trillos, utilero del Junior de Barranquilla. | Foto: Archivo


El balazo, según afirmó el mismo afectado, le entró por un costado del torso y le salió por la espalda.

“A cuatro centímetros de la médula, gracias a Dios no me pasó nada más grave, la herida fue profunda, me metieron mecha y me dieron siete días de incapacidad”.

El mismo proyectil que hirió a Frías también afectó en una pierna a un vecino suyo, de nombre Rafael. Ambos fueron llevados a centros asistenciales cercanos y ayer mismo fueron dados de alta.

Los delincuentes huyeron con cuatro celulares y 400.000 en efectivo. Este medio quiso hablar con Frías, pero no fue posible localizarlo. Su residencia permaneció cerrada todo el día.

Un allegado al utilero del equipo tiburón manifestó que está recuperándose en casa de una hermana. Pese a esta versión del robo, la Policía Metropolitana investiga otra hipótesis, en vista de que no son muy claras las declaraciones de las víctimas y que ninguno quiso instaurar una denuncia formal.

La otra línea investiga que se maneja es que, según la Policía, en la tarde del domingo se presentó una pelea en la fiesta, y por eso se habrían registrado los hechos de la madrugada.

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