La madre abrazada a una amiga durante una manifestación a las afueras de Medicina Legal
La madre abrazada a una amiga durante una manifestación a las afueras de Medicina LegalCortesía
¿Qué Pasa?

"Ayer cumplía 23 años y justo me la entregaron muerta": mamá de Valentina Cepeda

Lourdes Rodríguez Contreras, mamá de la hoy fallecida, reveló detalles del caso y exigió justicia a las autoridades.

Compartir en:
Por:
  • Familiares y amigos protestan afuera de Medicina Legal exigiendo justicia por Valentina Cepeda, de 22 años, encontrada muerta.
  • La madre, Lourdes Rodríguez, afirma que su hija no se habría suicidado, especialmente en su cumpleaños.
  • Revela detalles del caso y acusa a la pareja de Valentina, Álvaro Felipe Rivera, de ser responsable de la tragedia.

Justicia es la palabra que más se repite en las varias pancartas que se encuentran, en la mañana de este jueves, a las afueras de Medicina Legal, como forma de protesta por el caso de Valentina Cepeda Rodríguez, una joven de 22 años que, según la versión de su pareja, fue hallada con una sábana atada a su cuello, en una habitación de su apartamento, en el conjunto Torres de Villa Campestre.

Esta es la hipótesis que no les cuadra a los familiares de la víctima fatal, quienes aseguran que su cercana no sería capaz de quitarse la vida, menos en el día de su cumpleaños. Lourdes Rodríguez Contreras, madre de Valentina, con lágrimas en sus ojos, reveló nuevos detalles del caso y exigió justicia a las autoridades.

“Ella tenía toda una vida por delante. Ayer cumplió 23 años y justo me la entregaron muerta. Es un dolor grande. Los hijos entierran a los papás, no los papás a los hijos. Era la niña de mis ojos, me la arrebató ese desgraciado (pareja). Lo que me duele es que no nos llamó a nosotros, tampoco a la policía, nosotros lo hicimos desde donde estábamos. Él no la encontró, estaba ahí con ella”, fueron las primeras palabras de su mamá.

De acuerdo a lo relatado, para los padres todo pasó muy rápido, pues hasta estaban en constante comunicación con su hija porque tenían pendiente la tarea de llevarle una impresora. Se enteraron por la llamada que buscaba confirmar un servicio de ambulancia a nombre de Deivis Cepeda, padre de Valentina. La paciente era nada más y nada menos que su hija.

“Nosotros enseguida empezamos a llamar a el tipo (Álvaro Felipe Rivera Ramírez, pareja). Él contestó y dijo que Valentina estaba encerrada. Después nos llamó y dijo que se había colgado. Mi esposo se comunicó inmediatamente con el cuadrante de Villa Campestre”, afirmó Lourdes.

La mamá de la joven también aseguró que su hija había sido víctima de violencia el pasado sábado: “Ella me hizo una videollamada, yo iba en el transmetro, le había pegado —su pareja—. Los mismos del edificio ya habían llamado al cuadrante, pues ella pedía auxilio. Él no abrió la puerta, sino cuando llegó el vigilante y la Policía”.

“Las pruebas están, las tienen las amigas. El man era un controlador, manipulador, la golpeaba y tenía un arma letal que eran sus llaves de Jiu-jitsu. Él no tenía puñal ni nada, pero tenía esa arma”, agregó.

Este medio de comunicación pudo conocer que Valentina Cepeda Rodríguez tenía dos hermanos, Jessica y Alejandro. Junto con su familia, tenía planes de irse para Canadá en los próximos días. Una idea que aparentemente no le gustaba mucho a su pareja. Se ganaba la vida como instructora de yoga y estaba a punto de graduarse como licenciada en educación infantil.

En la clínica Portoazul, después de varias horas de estar recibiendo atención médica, un paro cardiorrespiratorio fue lo que le quitó la vida a Valentina Cepeda, justo en el día que cumplía 23 años de edad.

AL DÍA pudo confirmar que además de la hipótesis del suicidio, desde la Policía Metropolitana de Barranquilla y el CTI de la Fiscalía también se baraja la posibilidad de un presunto homicidio.

Según Álvaro Felipe Rivera, la joven tenían una sábana atada a su cuello y su cuerpo estaba suspendido, pero sus rodillas rozaban el piso. Sin embargo, de acuerdo con información suministrada por este mismo a las autoridades, lo primero que hizo fue tomarle una fotografía pensando que se trataba de una broma.

Por otro lado, en el centro médico donde fue llevada Valentina Cepeda, Rivera le cambió la versión de los hechos a los suegros.