Orlando Pelayo, el hombre que asesinó a su hijo de 11 meses en Chía, murió en Valledupar
El sujeto estaba internado en un hospital desde el pasado 10 de abril.
Cumpliendo una pena de 58 años y con el repudio de la sociedad colombiana tras su aberrante crímen. Así murió este sábado 22 de abril Orlando Pelayo, quien asesinó vilmente a su propio hijo de 11 meses en el municipio de Chía, Cundinamarca.
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Trascurría el año 2008 cuando el ahora fallecido y su pareja de ese momento denunciaron la desaparición del pequeño Luis Santiago, lo cual atrajo la atención de medios nacionales, por lo que pronto todo el país entró en vilo por la integridad del menor.
Ante las cámaras, Pelayo se veía afectado por la situación y rogaba por el pronto regreso del pequeño a su hogar; sin embargo, el caso dio un total vuelco al conocerse que él había sido el autor del homicidio del bebé.
Tras su captura, el hombre fue condenado y recluído en la cárcel La Tramacua de la capital del cesar, donde permaneció hasta el pasado 10 de abril cuando fue internado en el hospital Rosario Pumarejo López de esa misma ciudad por problemas renales, lo que finalmente ocasionaría su muerte.
El caso
Luis Santiago fue reportado como desaparecido en el municipio de Chía, en septiembre del 2008. Fueron días de angustia los que vivían los padres del menor de 11 meses, Ivonne Lozano y Orlando Pelayo.
La atroz historia inició el 25 de septiembre de 2008, cuando hombres encapuchados entraron a la casa de Ivonne Lozano y se llevaron al bebé. La mujer fue atada y amordazada.
Ante ello, las autoridades iniciaron una búsqueda exhaustiva para dar con el paradero del bebé y recibieron el apoyo de los familiares, especialmente el de Orlando Pelayo, quien en diferentes ocasiones expresó su supuesto dolor y desespero por la desaparición de Luis Santiago. Pero el caso tuvo un giro inesperado que horrorizó a los colombianos, pues los secuestradores delataron a Pelayo.
El niño murió asfixiado con una bolsa, cuando iba en el carro con los secuestradores; el cadáver fue hallado días después con una zona boscosa a dos horas de Bogotá.
