A la izquierda alias Castor y a la derecha Walid Makled, narcotraficante venezolano.
A la izquierda alias Castor y a la derecha Walid Makled, narcotraficante venezolano.Cortesía
Historias

Los nexos que habría entre ‘Castor’ y estructuras del crimen internacional

Al parecer, el estructura criminal 'los Costeños', estableció contactos con narcotraficantes y grupos delincuenciales, durante el tiempo que estuvo en prisión en Venezuela.

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No basta con preocuparse por el sicariato, la extorsión, el microtráfico y el robo de tierras por parte de estructuras criminales, que ya pareciese que hacen parte de la cotidianidad de Barranquilla y el departamento del Atlántico. Pues es común escuchar a ‘los Costeños’, ‘los Rastrojos Costeños’ y ‘los Pepes’, así como al mismo Clan del Golfo, y asociarlos con las rentas ilegales locales. Sino que ahora las autoridades están alerta por la aparición de tres grandes estructuras transnacionales que, al parecer, merodean en la población desde las sombras.

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Todo esto fue advertido en una alerta temprana emitida por la Defensoría del Pueblo el pasado mes de junio, en la que revelaban que en la ciudad, su área metropolitana y demás municipios habían nuevos actores extranjeros: El Tren de Aragua y El Cartel de los Balcanes, así como también reafirmaron la presencia del Clan de Sinaloa.

En ese sentido, AL DÍA habló con la periodista e investigadora venezolana Ronna Rísquez, quien escribió el libro denominado El ‘Tren de Aragua’. La banda que revolucionó el crimen organizado en América Latina. En medio de la conversación, vía telefónica, la mujer no descartó que este grupo, liderado por Héctor Rusthenford Guerrero, alias el Niño Guerrero, recluido en la prisión de Tocorón, en el estado venezolano de Aragua, esté detrás de nuevas rentas en la capital del Atlántico y sus alrededores.

“Las alertas de la Defensoría son superconfiables, si ellos lo dicen es porque debe estar pasando. Es muy lamentable que generalmente los gobiernos no le presten tanta atención. Pero aquí hay varios aspectos que se pueden destacar, y es que esta estructura siempre está buscando zonas turísticas o lugares donde haya oportunidades de rentas criminales que no hayan sido explotadas, como por ejemplo la trata de blanca o la extorsión”, expresó la experta.

En esa misma línea, Rísquez manifestó, a través de una especie de análisis, que los ciudadanos venezolanos en general tienen muchas más coincidencias con la gente de costa, por lo que quizá esto podría resultarle atractivo al ‘Tren de Aragua’. “De hecho han habido antes otras organizaciones venezolanas que han tenido una presencia pequeña en esta zona, o jefes de algunas organizaciones que han estado allí, no operando, pero sí como un lugar en el que se puedan refugiar”, añadió.

La periodista enfatizó en que no es descartable el hecho de que como ya han sido combatidos en ciudades como Bogotá, estos se trasladaran a otras ciudades a operar y radicarse allí. “Barranquilla es la ciudad más importante de la Costa, yo creo que tiene muchas virtudes y atractivos para que una organización delictiva pueda instalarse”.

“Es probable que por ejemplo el tema de la trata de blanca en Barranquilla a lo mejor ahí consiguieron una plaza. Dijeron «hay gente metida en otro tipo de delitos, pero en trata no. Vamos a entrar nosotros», eso es posible o lo otro es que tengan también una alianza con algún grupo colombiano de la zona de la localidad”, expresó la investigadora.

¿Alianzas?

Al margen de lo dicho, esta casa editorial conoció que en su momento las autoridades tenían en el radar una posible alianza entre Jorge Eliécer Díaz Collazos, alias Castor, jefe de la banda delincuencial ‘los Costeños’, y varios criminales venezolanos. Todo esto después de su captura y reclusión en el país vecino.

Pues ‘Castor’ se encontraba recluido en los calabozos del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin), en Caracas, Venezuela, mismo centro de reclusión en el que se encuentra el poderoso narcotraficante Walid Makled García, alias Árabe o ‘el Turco’, extraditado en 2011 a Venezuela luego de su captura en Cúcuta, Norte de Santander.

Recordemos que el nombre de Makled García surgió luego de que se diera a conocer que en medio de las indagaciones de la Dijín a la fiesta ocurrida en Punta Roca el pasado 24 de octubre de 2022, misma en la que fueron asesinadas dos personas en un enfrentamiento a tiros, surgieran los nombres de Álvaro Luis Ospino Illera, apodado ‘Negra Dominga’ y, a su vez, Víctor Rafael Reales Hoyos, quien en el pasado lideró la banda sicarial ‘los Piloneros’, que prestaba servicios al ‘Árabe’.

“Los calabozos del Sebín son una cárcel con ciertos privilegios y no me sorprendería que él (Makled) siguiera traficando drogas. Cualquiera no está en esa prisión, no hay presos comunes, ni siquiera siendo extranjero, o sea, solamente hay presos poderosos, entonces a este alias Castor alguien debió pedirlo para que estuviese allí”, expresó Ronna Rísquez.

En ese sentido no se descarta que estas dos personas (‘Castor’ y Makled) se hayan conocido ahí y que el reconocido narcotraficante, supuestamente, haya persuadido al jefe de la banda delincuencial colombiana para que le transportara droga en la región.

Asimismo, según lo comentado por la investigadora, tampoco es lejana la proyección de que dentro de aquella penitenciaría había miembros del ‘Tren de Aragua’: “El problema aquí es que el ‘Tren’ y todas las bandas tienen vínculos con el Gobierno, o sea, cuando digo vínculos es con funcionarios distintos, con gobernadores, con distintas figuras de niveles distintos. Entonces todo es posible, pues el ‘Niño Guerrero’ tiene también conexión con todas las prisiones, por lo que no veo descabellado que por allí hubiera podido venir una conexión”, detalló.

Por otra parte, la reportera manifestó que por sí solo el ‘Tren’ no tiene capacidad de mover droga, mientras que Makled sí: “Si el ‘Tren’ entrara para algo de drogas en Colombia tiene que entrar con alguien arriba que sea el dueño de la droga, no descartando que podría respaldarlos este narcotraficante”.

México y los Balcanes

Según la Defensoría del Pueblo, el Cartel de Sinaloa estaría controlando ciertos corredores estratégicos, especialmente cercanos al río Magdalena y el mar Caribe, y sus principales aliados en el territorio serían ‘los Costeños’ y las Autodefensas Gaitanistas de Colombia.

Por su parte, el Cartel de los Balcanes desde 2020 estaría haciendo presencia en ciudades como Barranquilla, Medellín, Santa Marta y Cartagena. Su presencia en la capital del Atlántico se debe a su interés en la exportación de la droga a países europeos, donde las rentas son mucho más elevadas que en Estados Unidos. Su accionar se da a través de emisarios en el territorio que vigilan la calidad y concreción del proceso, y que la droga salga del país en condiciones óptimas.

“Sus principales socios en Colombia serían las Autodefensas Gaitanistas de Colombia, quienes proveen a los Balcanes la droga que luego es exportada hacia Europa a través de los puertos de Barranquilla, Santa Marta, Cartagena y Buenaventura”, precisa el documento del Ministerio Público.

Sobre esto, EL HERALDO consultó con un experto en el movimiento de la criminalidad de la región Caribe y este precisó que hay una gran diferencia entre las tres estructuras transnacionales: “Hay que entender que no todo es narcotráfico. Uno así puede afirmar que Sinaloa y el de los Balcanes están interesados es en supervisar la salida de la cocaína, pero habría otros (Tren de Aragua) interesados en otras rentas ilegales, entonces es una organización que no tiene todas sus apuestas en la exportación de clorhidratos, sino en la captura de rentas ilegales en el territorio y seguramente también van a disputar espacio para la extorsión y para el microtráfico”.

Cabe resaltar que este medio dio a conocer que en el año 2020 la estructura venezolana intentó permear la ruta del narcotráfico; sin embargo, fue frenada por el mismo Clan del Golfo.

Respecto a la oportunidad que ven estas franquicias del crimen en Barranquilla, el investigador fue preciso: “En un contexto como el de Barranquilla, en el cual hay lo que uno denomina una anarquía criminal, es decir que no hay un grupo armado que someta a los demás, eso puede configurarse con una ventana de oportunidad para llegar a instalarse”, dijo.